¿Te gustaría a veces dar un golpe en la mesa y decir que no? Muchos de nosotros nos sentimos obligados a aceptar cada solicitud de recibimos, prefiriendo exprimir nuestra agenda y hacer malabares con un millón de tareas antes que negarnos a ayudar, incluso si no nos queda tiempo para nosotros. Siempre debemos estar ahí para nuestros seres más queridos, pero aprender a decir no puede hacerte ganar autoestima y el respeto de los que te rodean.
Entonces, ¿Cuál es la razón por la que seguimos diciendo que sí todo el tiempo? En ocasiones creemos que decir no egoísta, y tememos decepcionar a otras personas. También puede ser por miedo a caer mal, a que te critiquen o a arriesgar una amistad.
Curiosamente, la capacidad de decir no está estrechamente vinculada a la confianza en uno mismo. Las personas con baja autoconfianza y autoestima a menudo sienten ansiedad por enemistarse con los demás y tienden a evaluar las necesidades de los demás antes que las suyas.
Tal vez los padres dominantes han fomentado esta tendencia. Estas influencias de la infancia son clave para la formación de creencias tales como «Solo soy amable si soy obediente y servicial». Si sientes que prácticamente vives para agradar a las personas, tu autoestima puede haber llegado a depender de las cosas que haces para ellos. Se desarrolla así un círculo vicioso en el que las personas que te rodean esperan que estés ahí para ellos todo el tiempo y que tu misión en la vida es cumplir sus deseos.
Ser incapaz de decir no puede llevarnos al estrés, la irritabilidad e incluso al agotamiento físico. Las horas que pasas preocupándote por resolver compromisos podrían sabotear cualquier esfuerzo que hagas para mejorar tu calidad de vida. La clave consiste en no esperar que tu energía se agote antes de reevaluar la situación. Veamos algunos consejos para aprender a decir que no cuando sea necesario, que es uno de los derechos asertivos que todos tenemos.
Cómo saber decir ‘No’
- Mantén tu respuesta simple. Si quieres decir que no, sé firme y directo sin excusas innecesarias. Usa frases como «Gracias por acudir a mí, pero me temo que ahora mismo me es imposible» o «Lo siento, pero no puedo ayudarte en este preciso momento». Trata de ser fuerte en tu lenguaje corporal y no te excedas a la hora de pedir disculpas. Recuerda que no estás pidiendo permiso para decir que no.
- Tómate tu tiempo antes de responder. Interrumpa el ciclo del permanente ‘sí’, usando frases como «Le responderé mañana». Esto te dará tiempo para pensar y considerar tus opciones. Tras este periodo de reflexión podrás decir que no con más confianza.
- Si no estás tratando con personas de tu entorno, puedes utilizar un lenguaje algo más «agresivo». Por ejemplo, si están intentando venderte una tarjeta de crédito que no quieres, decir algo como «no uso tarjetas de crédito» será más efectivo que «en este momento no, gracias», dado que esta última frase implica que quizás en otro momento te puedan convencer. Este lenguaje también puede ser utilizado en otros escenarios. Si tus compañeros de trabajo quieren que salgas entre semana y tú no quieres, es más poderoso decir «no salgo entre semana», que «NO PUEDO salir hoy», ya que esta respuesta implica que estás más abierto al debate.
- Si no puedes decir no, ofrece una alternativa. Por supuesto, sabemos que algunos compromisos y obligaciones son difíciles de rechazar. No puede decirle exactamente a su jefe: «Lo siento, no trabajo nunca a partir de las 6 p.m», pero hay formas de facilitar el rechazo. En el caso de que te encarguen trabajo extra, podrías sugerir por ejemplo que no es la mejor opción para esa tarea porque estás ya sobrecargado de trabajo y no quiere sacrificar la calidad.
- Separa el no de rechazo. Recuerda que rechazar una solicitud concreta no es lo mismo que rechazar a una persona. La gente generalmente comprenderá que de igual forma ellos tiene derecho a pedir favores, tú también tienes derecho a decir que no.
- No se sienta culpable por decir no a tus hijos. Es importante que ellos oigan un no de vez en cuando para que desarrollen un sentido de autocontrol que les será muy necesario en el futuro. En lugar de ceder a sus protestas, hazles saber quién está al mando estableciendo unos límites.
- Sé sincero contigo. Plantéate con honestidad lo que realmente quieres.
Decir ‘no’ implica poner ciertas reglas para ti y refleja estabilidad y confianza en uno mismo. Aprender a decir ‘no’ es tomar las riendas de tu propia vida.
Originally posted 2018-09-06 15:06:54.