Psicología del deporte: una introducción

Sin puntuación aún

Una buen entrenamiento mental es tan importante como un buena preparación física para alcanzar nuestros objetivos en términos de rendimiento atlético. Tomando elementos de la psicología, la fisiología e incluso la sociología, la psicología del deporte es una ciencia interdisciplinar cuyo objetivo es el estudio de los factores psicológicos en el rendimiento deportivo, así como las formas en las que la participación en el deporte y el ejercicio influyen en el desarrollo psicológico.

La psicología del deporte genera así estrategias, métodos e instrumentos que utilizados apropiadamente consiguen una sensible mejora del rendimiento en los deportistas. En la preparación psicológica se integran motivación, técnicas de relajación, técnicas de apoyo y tratamiento, entrenamiento mental y métodos para combatir la ansiedad, la presión y el estrés de las competiciones. También estudia las dinámicas de grupo en los deportes de equipo, un pilar fundamental para el éxito del mismo. En definitiva, a la psicología deportiva le interesa todo cuanto pueda contribuir de manera óptima a la puesta a punto y mentalidad para competir.

También la neurociencia puede aplicarse en el deporte de alta competición para comprender mejor el rendimiento de los deportistas, abordando las relaciones indisociables entre el cerebro y el potencial motriz del cuerpo. Bien es sabido que los músculos tienen memoria, y pueden recordar patrones motores adquiridos. Pero lógicamente el cerebro es parte esencial de la ecuación, puesto que es imprescindible para la memorización de las técnicas y también para la calibración emocional para que el atleta llegue a su nivel máximo de rendimiento. Obviamente un atleta con problemas de depresión no rendirá igual que aquel con un perfecto equilibrio mental y emocional.

Lee también La asertividad y los derechos asertivos

La psicología deportiva es una disciplina fundamental para entrenadores, preparadores físicos, profesores de educación física, psicólogos y en definitiva para todos aquellos interesados en la conducta de las personas que practican deportes y actividades físicas.

En el siguiente vídeo aprenderemos más sobre cómo la psicología del deporte puede aumentar el rendimiento de los deportistas.

En su aplicación práctica, la psicología del deporte se desarrolló como una herramienta de entrenamiento con el potencial de mejorar el rendimiento. Numerosos equipos deportivos profesionales y universitarios contratan psicólogos deportivos para realizar ejercicios específicos con los atletas. Estos ejercicios de psicología deportiva incluyen el establecimiento de objetivos, técnicas de visualización, pensamiento positivo y autoconciencia.

Establecimiento de metas

Una de las características de los atletas con más éxito es la capacidad de establecer metas claramente y usar dichos objetivos para motivarse en sus entrenamientos. Completar los ejercicios de establecimiento de objetivos es una de las tareas más importantes para que un atleta pueda concentrarse y dirigir correctamente su energía. Al describir objetivos específicos de resultados, el deportista puede mejorar su rendimiento a través de una mayor motivación, confianza y habilidad. Las reglas generales para establecer objetivos incluyen la definición de objetivos realistas, específicos, observables y medibles.

Visualización

La visualización es un ejercicio de psicología deportiva que implica «ensayos mentales» en los que el deportista se imagina rindiendo al máximo. Los atletas profesionales utilizan ejercicios de visualización combinados con pensamientos positivos para ensayar sus actuaciones antes de llevarlas a la realidad. Por ejemplo, un jugador de baloncesto visualizará la distancia a la que está la canasta y luego ensayará su aproximación, como se moverá, continuará viendo la trayectoria del balón y cómo termina entrando en la canasta. La visualización puede aplicarse a muchas otras áreas de nuestra vida.

Lee también ¿Estás satisfecho con tu vida? Cómo medir la felicidad

Pensamiento positivo

El viejo dicho «el vaso puede verse medio lleno» también se puede aplicar a los ejercicios de psicología deportiva que fomentan la confianza del deportista en uno mismo. La mejor estrategia es practicar una actitud optimista siguiendo las prácticas, las sesiones de entrenamiento y los partidos o competiciones. El deportista ha de enfocar todos los días cada entrenamiento o partido como una nueva oportunidad de lograr el mejor resultado posible. Se sugiere utilizar frases positivas como «mis pies son los más rápidos» o «tengo que ser agresivo» para mantener una actitud positiva para mejorar la concentración y el rendimiento.

Conciencia de uno mismo

Los ejercicios de autoconciencia están diseñados para ayudar al deportista a aprender de cada experiencia, ya sea negativa o positiva, encontrada durante el partido o los entrenamientos. En estos ejercicios se puede utilizar el análisis de vídeo para revisar sus actuaciones anteriores y determinar sus fortalezas y debilidades. También se puede usar el vídeo para detectar los momentos en que su rendimiento disminuyó y cómo respondió a la situación. Los ejercicios de autoconciencia deben complementarse con el establecimiento de objetivos y la retroalimentación de los entrenadores y compañeros de equipo.

Lecturas recomendadas sobre psicología del deporte